lunes, 11 de agosto de 2008

Maldito euro


La NBA es la maquinaria más perfecta y endemoniada de producir dólares para sus cuentas. A lo largo de su historia, supo sobrevivir a las crisis económicas y pegó el gran salto de calidad con la llegada de David Stern como el máximo dirigente. Este abogado, desde que fue nombrado como Comisionado en 1984, fue el encargado de incoporar el marketing a esta competencia (a los partidos les agregó todo el show que tienen alrededor, transformándolo en un verdadero espectáculo), firmó contratos multimillonarios con la televisión y aprovechó al máximo a figuras de la talla de Magic Johnson, Larry Bird, Michael Jordan, etc. Luego, expadió la cosa al resto del planeta y reemplazó (aunque ese no es el término correcto) a aquellas grandes luminarias con jugadores de otros países para que la NBA resultara atractiva en todo el mundo.
Jugar NBA es el sueño de casi todos los jugadores de este deporte. Pero en el nivel profesional en el que todo esto se mueve ahora un nuevo elemento aparece en escena y comienza a preocupar a la liga más famosa. El dólar ya no es la moneda más fuerte y el euro le saca ventajas. El cambio actual indica que por cada unidad de la moneda del viejo continente se necesitan 1,48 del verde dinero. Y la tendencia ya comenzó a evidenciarse. Varios jugadores ya comenzaron a rechazar la gloria y los dólares de la NBA por la liquidez de los poderosos europeos.
Por ejemplo, el argentino Carlos Delfino firmó por 30 millones de dólares (20 millones de euros), por tres temporadas, en el Khimki ruso. Una locura. De esta manera, cobrará muchísimo más que las ofertas, por la misma cantidad de años, que recibió de distintos equipos de NBA por 9, 12 y 14 millones de dólares. Incluso, el alero Josh Childress dejó Atlanta Hawks y fichó por el Olympiakos griego por 20 millones de dólares (unos 13 millones de euros).
Y ojo. Ese mismo club helénico le ofrecería a LeBron James entre 40 y 50 millones de dólares por año (entre 27 y 33 millones de euros). La cara más usada en la actualidad por la NBA podría tentarse por el próspero dinero europeo. Y lo peor para la liga norteamericana es que James, que tiene contrato con Cleveland Cavaliers hasta 2010, dijo que no descartaría irse al Viejo Continente.
¿Será que el King LeBron mostrará estas jugadas en Europa en poco tiempo? Mirá el video e imaginalo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Siga adelante con el blog maestro...Así instruye a sus amigos que no saben de básquet.
Un abrazo

El cholito

Anónimo dijo...

Muy buena info Lunita, no sabía lo de Delfino. Un poco me alegra que dejen de acaparar todo esos yankis culiaus...
Un abrazo
Juancito